Voluntarios de una sociedad de protección de animales en Australia, rescataron a un gatito que sufrió quemaduras debido a los petardos pegados a su pelaje.
Cuesta creer que haya gente con este grado de maldad como para querer dañar a un inocente e indefenso animalito.

Quienes amamos a nuestras mascotas, al punto de considerarlos miembros de la familia, no podemos entender cómo se puede ser tan cruel.
Alguien sin corazón.
Los rescatistas acudieron al llamado de unos vecinos de Brisbane, Australia, que denunciaron que habían encontrado a un gatito malherido en un contenedor.
Cuando los voluntarios llegaron, no podían creer lo que estaban viendo. Era horrible.

Un pequeño gatito de pocas semanas de vida, estaba envuelto en cinta adhesiva y tenía petardos pegados a su pelaje.
Estaba claro que algunos de esos petardos habían estallado, porque el pobre animalito tenía parte de su boca lastimada y el cuello quemado.
Afortunadamente, pudieron rescatarlo a tiempo para curarle las heridas.

Charlie, que fue como lo llamaron, tuvo una nueva oportunidad, gracias a los cuidados de los veterinarios.
Lograron retirarle las citas adhesivas del pelaje y curarle las heridas que le provocaron los petardos.
“Francamente, no tengo palabras. Cómo alguien podría tratar a un animal así y después desecharlo como basura. ¡Es espantoso! Este nivel de ofensa muestra una falta total de empatía y un nivel de crueldad muy inquietante”, dijo Daniel Young, inspector jefe de QLD de RSPCA.
El pobre Charlie se recupera de la locura de alguien sin corazón.
Encuentran al responsable.
Pero los voluntarios de RSPCA , la organización Royal Society for the Prevention of Cruelty to Animals, no quisieron que este hecho aberrante quedara impune.
Estas acciones de crueldad hacia los animales, deben ser severamente castigadas.
Hay pruebas fehacientes de que los asesinos seriales o los responsables de horribles crímenes, empezaron con actos de crueldad hacia los animales.

Es necesario castigar a los responsables y estar atentos a sus futuras acciones.
Luego de una investigación, se realizó un allanamiento en la casa de un joven de unos 20 años, que, al parecer, está involucrado en este hecho.
En el lugar, se encontraron petardos, fuegos artificiales y cinta adhesiva con restos de pelaje animal. También narcóticos.

Y no sólo eso, cuando revisaron el teléfono móvil del presunto responsable, encontraron un video en el que se veía a otro gato con petardos adheridos a su pelaje.
Tal vez ese pobre gatito no tuvo tanta suerte como Charlie, que debe agradecer que los voluntarios lo rescataran a tiempo.
¿Qué castigo se merece alguien que actúa con tanta maldad?